YOGA
La práctica de Yoga es volver a tí, es el cultivo de la escucha profunda. Una vía y herramienta de autoconocimiento. La raíz de la palabra Yoga, del sánscrito yuj- unión, una práctica que potencia la unión de nuestras dimensiones físicas, mentales y espirituales.
El Yoga Vinyasa enseña una serie de asanas (posturas) enlazadas sobre una base de respiración consciente que pueden variar en intensidad y dinamismo. Se facilitan secuencias creativas que combinan el movimiento y la quietud aportando flexibilidad al cuerpo y a la mente. Asana, pranayama y meditación guiarán la sesión permitiéndonos liberar tensiones y fortalecer nuestro centro vital, Hara. Un viaje que aúna movimiento y respiración abriéndonos a la presencia y a la consciencia corporal.
Partiendo de las bases del yoga iremos creando una práctica que se adaptará a las necesidades y capacidades de cada uno, y mediante la cual se fortalece el cuerpo, restablece el equilibrio energético, mejora la capacidad de concentración y de llevar la atención al presente.
QI GONG
El Qi Gong es una práctica ancestral integrada dentro de la Medicina Tradicional China, y que tiene como objetivo aumentar la vitalidad, mantener y cultivar la salud.
Esta técnica se basa en movimientos lentos y armónicos que equilibran el flujo energético y aportan fuerza y vitalidad. Nos movemos a un ritmo relativamente lento concediéndonos el tiempo necesario para sentir y coordinar postura, respiración e intención.
Se trabajarán secuencias de movimientos continuos, suaves estiramientos y automasajes que liberan el potencial autocurativo natural del cuerpo. Todo ello con el objetivo de restaurar el equilibrio, establecer una buena base desde los pies (enraizar) y aumentar el nivel energético del organismo. El cuerpo como una unidad que integra lo físico, lo mental, lo emocional y lo espiritual.
PILATES
El método Pilates es un entrenamiento físico y mental que buscan la educación corporal con una serie ejercicios anaeróbicos, que se realizan de forma breve y que se basan, fundamentalmente, en la fuerza. Los seis principios esenciales de este método son control, concentración, fluidez, precisión, respiración y centro.
Su objetivo principal es reforzar la musculatura y aumentar el control, la fuerza y la flexibilidad. Mejora la coordinación y el equilibrio y restituye la vitalidad física. La base sobre la que se construye este sistema, es el centro, lo que llamamos core. Nos movemos desde este centro que es estabilizador y generador de energía para el movimiento.
La mecánica respiratoria es clave para un buen desarrollo de este sistema.Estas sesiones aportan energía y fuerza a la vez que corrigen hábitos posturales.